Llámame rara, pero quiero a tu banda original, quiero esos temas que salen de los ensayos de vuestras mentes, de vuestra imaginación, de todo eso que esta ahí dentro, de influencias de vaya usted a saber. Eso es lo que a mi me transmite más, ¿soy un bicho raro? Quizás soy una de las pocas excepciones,. Y últimamente lo hecho de menos. Te quiero a ti como eres, no quiero unas versiones. Quiero a la banda como es, como comenzó. No te digo que no hagas alguna versión entre tus temas, eso siempre anima el cotarro, ya lo sé. Pero no quiero que se quede en eso.
Y lo sé, te entiendo. No se llenan las salas, la gente a penas se interesa por lo nuevo a no ser que sea muy conocido o que sea el amigo o conocido de no se quién. Sin embargo me apena pensar que esa creatividad, esas ganas por crear algo de la nada se acaban enterrando por las versiones.
Por eso cada fin de semana que puedo me acerco a ver a una banda haciendo su música y no la de los demás. Y si, son pocos los que me acompañan en el camino, en ese bar, en esa sala, pero se que aún queda gente como yo.
Y espero que esto no se convierta en un cementerio de bandas que pudieron ser y no fueron porque la gente quería que fueran más una orquesta que una banda con sus propias iniciativas.
Apuesta por lo que tengan que ofrecer los músicos. Apuesta por lo que sale del local de ensayo y no lo que ya salio hace años a kilómetros de aquí. Disfruta de lo nuevo que te van a contar.
Los clásicos son sagrados, y son basicos. Pero no los convirtamos en carnaza.
Sonia
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