Dimensión Paralela XLII --> Fungus & Chivo

El sábado teníamos una cita en el bar Krawill de lo viejo de Pamplona para apoyar un concierto programado por Edorta, amigo y compañero de muchas noches por los bares. En esta ocasión dos bandas nacionales fuera de lo que pueda conocer y escuchar yo habitualmente.

Sobre las siete y media de la tarde comenzó la actuación de los vascos Chivo que nos aplastaron con su sonido pesado y funerario. Básicamente una losa cayó sobre mi en la hora más o menos que estuvieron tocando. Unos acordes muy graves y lentos persistieron a los largo de su actuación, brevemente removidos por unos compases más intensos, unos cambios de ritmo que fueron lo que más me gustó.

Su guitarra mantenía unos riffs pesados hasta la saciedad que me dejaron apalancada con ese sonido de ultratumba, doom, oscuro. De todas formas es genial conocer y ver estas cosas en directo, aunque a mi en directo sin duda me gustan cosas mas animadas. Impresionante la labor del bajo que hacia volar los dedos por el bajo con muchísima soltura. Al batería en una de las canciones se le rompió una baqueta por la mitad pero no dejo de tocar aunque sonó un poco raro en ese breve intervalo. Chivo son una losa, así los definiría. Muy pesados para mi gusto. Pesados y muy fúnebres. Pero se lo curraron de lo lindo y agradecemos que se animaran a tocar por aquí.

Posteriormente la cosa se animó y la losa no cayó de nuevo sobre mi ya que Fungus, desde Madrid, le metieron otra velocidad al asunto, además de meter algún que otro sonidito espacial entre tema y tema e impregnar al techo del krawill de puntitos rojos y verdes. Su música es más directa y cuenta con más melodía que Chivo. Me gustaron más por eso, aunque a veces se iban en los temas por las ramas y me perdía entre tanta experimentación. Muy interesante y potente fue la versión que se marcaron de Kuraia con la colaboración del cantante de Chivo.

Impresionante el nivel del guitarra, que manera de tocar a pesar de algún que otro percance que tuvo creo con sus pedaleras. Y aún así, tremendo. Repartiendo a diestro y siniestro acompañado por una enfermiza batería. Y como bien decía Edorta en su evento del concierto "SPACE ROCK arenoso y cósmico". En cualquier momento un alien podía haber aterrizado por el Krawill y nos podría haber llevado a todos en la nave espacial con esto de banda sonora.

En definitiva muy interesante la velada del sábado con algo a lo que no estoy acostumbrada pero que nunca esta de mas conocer y ver en directo. Hay que ver de todo para tener una visión global. De todas formas el sonido no da para más en un bar que no esta acondicionado para ello, pero lo disfrutamos igual.
Gracias a las bandas y a Edorta por su labor y al Krawill y a Jose Ángel, nuestro querido camarero y apoyo en las noches pamplonesas por haber dejado que algo así haya tenido lugar.

Gracias por leer,

Sonia